Elon Musk, CEO de Tesla y X (anteriormente Twitter), vuelve a encender las redes sociales tras emitir una contundente respuesta a la nadadora transgénero Lia Thomas, quien recientemente afirmó: “No soy un hombre” en un video que ha causado furor en Internet.

La declaración de Thomas surgió como respuesta directa a los miles de comentarios y críticas que ha recibido desde su participación en competiciones femeninas de natación en los Estados Unidos. Pero lo que ha hecho explotar aún más el debate ha sido la intervención feroz de Elon Musk, quien no dudó en expresar su opinión con su estilo directo, desafiando una vez más la corrección política.
En una entrevista difundida en redes sociales, Lia Thomas declaró con firmeza: “Estoy cansada de que cuestionen mi identidad. No soy un hombre. Soy una mujer trans, y merezco respeto como cualquier otra persona”.
Estas palabras, lejos de calmar la polémica, encendieron aún más los ánimos. Mientras algunos sectores defendieron su derecho a competir como mujer, una ola de reacciones críticas no tardó en invadir las redes, especialmente en X, donde el debate sobre el deporte y la identidad de género lleva tiempo siendo un campo de batalla.
En cuestión de horas, Elon Musk citó el video de Lia Thomas con un escueto pero contundente mensaje:
“Negar la biología básica no es valiente, es peligroso”.
El comentario fue suficiente para desatar una nueva tormenta en la plataforma. Miles de usuarios reaccionaron de inmediato, con mensajes tanto de apoyo como de rechazo. Algunos lo aplaudieron por “decir lo que muchos piensan pero no se atreven”, mientras otros lo acusaron de fomentar la intolerancia.
Musk, lejos de retractarse, continuó publicando. En otro tuit señaló:
“No se trata de odio, se trata de proteger la equidad en el deporte femenino. Las mujeres han luchado durante décadas por tener sus propias categorías. Esto no es progreso, es retroceso”.
El hashtag #LiaThomas se posicionó rápidamente en las tendencias globales, seguido de cerca por #ElonMusk y #JusticiaDeportiva. Las discusiones se volvieron cada vez más polarizadas.
Muchos deportistas, tanto activos como retirados, también se sumaron al debate. La ex nadadora olímpica Riley Gaines, crítica frecuente de la participación de atletas trans en competiciones femeninas, respaldó a Musk afirmando que “por fin alguien con poder se atreve a decir la verdad”.
En contraste, activistas por los derechos LGTBIQ+ acusaron a Musk de “usar su influencia para avivar discursos de odio”, y pidieron una mayor moderación de contenido en su plataforma.
La reacción de Musk plantea una vez más una de las preguntas más debatidas en la era digital: ¿dónde termina la libertad de expresión y dónde comienza el discurso de odio?
Defensores de Musk argumentan que el empresario está defendiendo principios científicos y la integridad del deporte. Por otro lado, sus críticos sostienen que su postura deshumaniza a personas trans y fomenta el acoso en línea.
Esta no es la primera vez que el magnate sudafricano se involucra en temas de género. En múltiples ocasiones ha cuestionado públicamente políticas relacionadas con el lenguaje inclusivo, el uso de pronombres y las leyes transgénero en Estados Unidos.
Mientras el debate sigue escalando, tanto Thomas como Musk han ganado miles de seguidores… y también detractores. Lo cierto es que el tema ha reabierto un debate global sobre la inclusión, la biología, y los límites del deporte competitivo.
Por ahora, Lia Thomas no ha respondido directamente a los comentarios de Musk, aunque sus seguidores aseguran que pronto lo hará. Musk, fiel a su estilo, sigue tuiteando como si no tuviera nada que perder.
Y si algo ha quedado claro, es que cuando se cruzan figuras públicas de gran impacto con temas sensibles, las redes no perdonan y el mundo observa con atención.